Sobre lo que sucede: www.nytimes.com/es/2021/05/05/espanol/protestas-policia-colombia.html

A Colombia le están borrando el horizonte. La siguen pisoteando y violando de formas atroces, faltas de toda dignidad, capaces de crear en nuestro sentir una distorsión profunda, cuya más triste forma es la reducción de la esperanza, el fin del tiempo: la muerte. Desde la unión global de colectivos, sellos, artistas, gestorxs y escuchas, nos declaramos en completo rechazo de las acciones que el Gobierno de Colombia ejerce sobre su pueblo. Desde el sonido nos mantenemos en resistencia y solicitamos soluciones reales para los tantos problemas que afronta nuestro país.

La sonoridad crea ventanas a un sin fin de Horizontes, tanto los que nos confunden como aquellos que nos permiten soñar. Vivimos un momento que nos llama en grupo a unir las fuerzas sónicas en torno a la ineludible lucha del pueblo colombiano, entregando la voz, el pulso y la melodía como himno de nuevas utopías; entregando música como vía para sanar y regenerar, como fuente de alegría y recordatorio permanente de que estamos vivxs.

Nos sumamos a las movilizaciones presenciales y virtuales con sonoridad y resonancia, también nuestras formas de ser. Nos estaremos manifestando a través de esta serie de compilados que nos permitan darle continuidad al grito de justicia. Donaremos el 100% de los ingresos a diferentes agentes y comunidades vulneradas y en necesidad durante el Paro Nacional (Brigadas de salud, Minga Indígena y organizaciones de DDHH).

El ruido es nuestro.

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About our situation: www.theguardian.com/world/colombia

Colombia's horizon is being erased. It continues to be trampled and violated in atrocious ways, lacking all dignity, capable of creating in our feelings a profound distortion, whose saddest form is the reduction of hope, the end of time: death. From our global union of collectives, labels, artists, managers and listeners, we declare ourselves in complete rejection of the actions that the Government of Colombia exercises on its people. From the sound we remain in resistance and request real solutions to the many problems facing our country.

Sound creates windows to endless horizons, both those that confuse us and those that allow us to dream. We live in a moment that calls us as a group, in which sonic forces unite around the inescapable struggle of the Colombian people, delivering the voice, the pulse and the melody as a hymn of new utopias; delivering music as a way to heal and regenerate, as a source of joy and a permanent reminder that we are alive.

We join the face-to-face and virtual mobilizations with sonority and resonance, also our ways of being. We will be manifesting ourselves through this series of compilations that will allow us to give continuity to the scream for justice. We will donate 100% of the incomes to different agents and communities in need during the National Strike (Health Brigades, Indigenous Minga and human rights organizations).

Noise is ours.